Esta pirámide escalonada está localizada en el Patio del Sol de la Plaza Principal. La investigación realizada por eruditos hondureños encontró que los monumentos en el Patio del Sol fueron diseñados por los antiguos mayas para facilitar las observaciones solares a través del año. Esta pirámide era usada para facilitar las observaciones de solsticios, equinoccios y pasos cenitales del Sol.
Tepeu Roberto Poz Salanic
La Plaza Principal y la Acrópolis más al fondo comprenden las secciones principales de Copán, donde muchas estructuras fueron construidas por 18 Conejo. Además de las estructuras restauradas en el centro de la ciudad, los arqueólogos han registrado 3.420 edificios antiguos.
Tepeu Roberto Poz Salanic
Estela A, uno de los “árboles de piedra” de Copán. La imagen esculpida es la del rey 18 Conejo, mostrado en unas vestiduras espectaculares junto con textos jeroglíficos y la fecha 9.14.19.8.0 del calendario de Cuenta Larga o 731 d.C. La piedra volcánica usada para esculpir las esculturas permitieron a los artistas mayas dar a las figuras una cualidad tridimensional y detalles elaborados.
La investigación de astrónomos hondureños sugiere que esta escultura, Estela D, fue utilizada por los antiguos mayas como un reloj solar para programar rituales y celebraciones. El análisis de la sombra de la estela demuestra como los mayas documentaban indicadores de estaciones a través del año. Las serpientes esculpidas representan el Sol durante los solsticios, equinoccios y pasos cenitales.
La Escalinata de los Jeroglíficos, con más de 1.250 bloques de glifos, es la inscripción de texto jeroglífico más larga de las Américas. Las historias de batallas y conquistas están esculpidas en el frente de los anchos escalones que suben la gran pirámide. La historia destaca los logros de los antepasados del Rey “Humo Concha”.
El Juego de Pelota A, uno de los tres juegos de pelota en este yacimiento, es el segundo más grande de Mesoamérica después del Gran Juego de Pelota en Chichén Itzá. El juego de pelota se jugaba con una pesada pelota de caucho masisa. Los jugadores le pegaban a la pelota con las caderas y muslos cubiertos por un equipo protector. El juego de pelota mesoamericano tenía un significado cósmico para los antiguos mayas. La pelota simbolizaba un astro y el campo en sí servía como un portal al mundo de los antepasados y deidades.
Guacamayos esculpidos en piedra adornan las paredes del Campo de Juego de Pelota A. En Copán el guacamayo está asociado con el Sol y su movimiento a través el cielo.
Tepeu Roberto Poz Salanic
Un guacamayo escarlata, uno de docenas que vuelan libremente y viven en este yacimiento, está limpiando sus plumas. Con sus plumas color amarillo, rojo y azul brillante y vuelo elegante, el guacamayo es un digno símbolo del Sol.
Tepeu Roberto Poz Salanic
El Altar Q original que fue hallado en la Acrópolis ahora se encuentra protegido dentro del Museo de Esculturas. La línea dinástica de la realeza en Copán está plasmada en los cuatro lados del altar cuadrado. Los retratos de 16 gobernantes se muestran en orden histórico, cada uno en vestiduras reales y sentados sobre el glifo que identifica su nombre. El altar fue comisionado por el último gobernante, Yax Pasaj, en el año 776 d.C.
Tepeu Roberto Poz Salanic
El Popol Nah, que significa “Casa de la Comunidad” en maya, es donde el gobernante de Copán se reunía con su corte y consejeros principales para tomar decisiones importantes que afectaban al estado. Fue construido por el decimocuarto gobernante, K'ak' Joplaj Chan K'awil en el año 746 d.C. Las casas de consejales todavía se utilizan en comunidades mayas contemporáneas.
Tepeu Roberto Poz Salanic
Varios túneles, excavados en Copán como parte de investigaciones arqueológicas, dejan al descubierto muchos edificios enterrados. Muy debajo del Templo 16 está el Templo de Rosalila, encontrado en forma casi intacta por el arqueólogo hondureño Ricardo Agurcia Fasguelle. Rosalía cuenta con K'inich Yax K'uk' Mo', el primer gobernante de la dinastía, en una composición mitológica con el ave celestial maya, la deidad Itzamna’. Esta reproducción a escala real está en el Museo de Esculturas de Copán.
Detalle de escultura muestra un personaje sujetando un conejo en representación de la Luna.
Una fina escultura de Chaac, el dios de la lluvia. Un cormorán con un pez en su pico brota de la cabeza de la deidad.
Tepeu Roberto Poz Salanic
